Tomar la decisión de ser nuestro presente o nuestro pasado cada vez que cruzamos el calendario, puede ayudarnos a despejar el camino hacia uno de los espejos más necesarios, el de nuestra identidad.
También podemos decidir “ser nuestro futuro”, así el corrector del google docs (inteligencia artificial) piense que no se puede ser – tiempo presente- y futuro a la vez. Nosotros los humanos sabemos que si. Puedo decidir “ser mi futuro” al ser mi intención más constante, quiero ser mi intención más constante.
Cuando cruzamos el calendario, quiero ser mi intención más constante.
Mi idea para este enero es proponerte que te hagas algunas preguntas e intentar contestarlas. No hay prisa. Tenemos todo enero para darles una respuesta.
¿Qué intención constante quieres ser?
Hay otras preguntas que me hago y las uso como pretexto para ordenar mi mente, espero que te sean útiles.
¿Qué historia me estoy contando a mí mismo?, ¿qué quiero contarles a los demás a través de lo que pienso y hago?, ¿qué quiero ser para los otros?, ¿qué quiero ser para mi?
Como le decía a un amigo, no me importa que las resoluciones de enero anden devaluadas, se vale creer en la energía de cambio al iniciar el primer mes del año. Y sí, se vale creer.
Mucho más, cuando estamos cruzando el calendario.
Te deseo un buen comienzo de año.
Mauricio Aranguren Molina